PUBLICAT PER MusicaAntigua
Philippe Jaroussky, con su maravillosa voz y la facilidad para la coloratura, se ha convertido en el contratenor de moda del momento actual.
«Una voz de contratenor –dice Jaroussky– no deja a nadie indiferente. Puede chocar o conmover, en todo caso exacerba nuestra sensibilidad. Un contratenor no es un ser excepcional, es sobre todo una cuestión de registro vocal y de técnica.»
Pero esa voz ¿es de un hombre o de una mujer? La pregunta es inevitable cada vez que alguien se enfrenta por primera vez a la extraordinaria experiencia de escucharle.
Los falsetistas y contratenores -hay discusiones bizantinas a cerca de cuando se aplica uno u otro nombre, pero para lo que hoy nos ocupa, asumamos que son equivalentes- han cobrado protagonismo en las últimas décadas, desde el resurgir de la música barroca en su corriente historicista.